La vida está llena de momentos diversos: De alegría, entusiasmo, de tristezas, de rabia y de frustración.
En Sintonizados queremos enfocarnos en aquello que le pone colores cálidos a tu vida, aquellas buenas noticias que te gustaría compartir con los otros al encontrártelos en los pasillos o en las oficinas de nuestra Dirección SSMO.
Nacimientos, finalizaciones de carreras, premios y becas obtenidas, un nuevo nieto o nieta en la familia, un terrenito en la playa donde te harás la cabaña de tus sueños.
Sabemos que no hay mucho tiempo ni espacio, menos en esta pandemia, para conversar y compartir con un café esta buena noticia que también llenará de alegría a los más cercanos.
Por esa razón hemos querido abrir una ventana para que puedas “poner en común” esa novedad que te tiene tan feliz.
No hay noticias grandes espectaculares ni noticias simples y pequeñas. Solo hay noticias que alegran el corazón de todos y te invitamos a compartirlas con nuestra comunidad de funcionarios y funcionarias, con quienes pasamos un tercio de nuestra vida, por lo que son nuestros compañeros en gran parte del camino.
Sabemos que esto nos permitirá sobrellevar de mejor manera el tiempo difícil que hoy atravesamos. Construyamos entre todos un círculo virtuoso de buenas noticias, que proporcione alegría a nuestro entorno.
¡Comparte tu buena noticia, te esperamos!
Camila Navarrete del Depto de Recursos Humanos dio el gran paso y cambió su estado civil: Nos sumamos a su felicidad en el inicio de este camino
Camila Navarrete, nuestra colega de la Unidad de Desarrollo de Personas del Departamento de Recursos Humanos el pasado jueves 2 de junio contrajo matrimonio con su pareja Matías Quezada.
Luego de 9 años y medio de relación, ambos quisieron dar el sí ante el Registro Civil del Mall los Dominicos y su familia. Después de la ceremonia ambos compartieron un almuerzo familiar para celebrar este momento tan significativo con los suyos.
Como Dirección de Servicio de Salud Metropolitano Oriente queremos desearles el mejor de los éxitos en esta nueva etapa de su vida y sin duda alguna nos sumamos a su felicidad como pareja, a la de su familia, amigos y equipo de trabajo.
Agradecimiento de Verónica Valenzuela por el apoyo de
sus compañeros en momentos difíciles de salud
Verónica Valenzuela, nuestra colega del Servicio de Bienestar Central pasó por un momento delicado de salud el año pasado en donde todos nosotros pudimos colaborar con un granito de arena realizando una colecta.
Nuestra compañera agradece a nuestra institución por todo el apoyo brindado, dado que en este momento de reinserción laboral se pudo reencontrar con compañeros de toda una vida y conocer a nuevos también.
Verónica nos destaca la gestión, dado que representa los altos valores explicitados en la misión del Servicio de Salud por “Entregar una atención de salud cálida, digna, oportuna, segura y efectiva que satisfaga las necesidades de la población usuaria del SSMO”.
Hace énfasis en sus agradecimientos a cada uno de sus compañeros de trabajo que solidarizaron con ella y la apoyaron a solventar parte del pago de su intervención quirúrgica.
Para finalizar, Verónica espera que este espíritu solidario se mantenga y se acrecente puesto que “Una organización que aprende es aquella que facilita el aprendizaje de todos sus miembros y experimenta en sí misma una transformación continua”.
Carmen Aracena: “No quiero más ni necesito más, con mi nieto estoy completa”
“Ver a mi hija siendo mamá y siendo tan sabia y tan inteligente me da una enorme felicidad”, cuenta Carmen Aracena, analista de Bienestar con más de 30 años en la DSSMO, quien ha sido abuela de un adorable niño llamado Diego, que nació el 30 de enero pasado. “¿Y qué es la felicidad sino ver felices a las personas que yo amo? Es una felicidad mayor que haber sido mamá”, refiere Carmen, con un sentimiento del que no cabe en sí. Verónica Romero, su compañera de oficina de tantos años, cuenta que de verdad Carmen no es la misma: “Está realmente feliz, alegre, le cambió completamente la vida”, a lo que Carmen agrega: “Alguien dijo que los nietos se quieren más que a los hijos. Yo no se expresar en palabras la felicidad que siento. Mi vida tenía mucho sentido, pero este nieto le dio más poder a mi felicidad”.
Supo de su primer nieto el día de su cumpleaños el 3 de octubre de 2020, cuando su hija Karin y su pareja le obsequiaron una caja con forma de corazón y en su interior venía un babero y zapatitos de guagua que confirmaban la noticia. Así, Carmen vive su felicidad desde la abundancia. “No quiero más ni necesito más. Con esto ya estoy completa”.
Lidia Mora: "Me lo debía. Quería realizarme y estudiar
“Me lo debía. Quería realizarme y estudiar. Saqué buen puntaje en la Prueba de Aptitud Académica y pude haber estudiado una carrera, pero tuve que estudiar algo corto. Me casé, crié a mis tres hijos y me tuve que postergar. He cumplido con mis hijos y me dije: ahora me toca a mí”. Así resume Lidia Mora -Gestora de Personas de Recursos Humanos DSSMO- su decisión de completar la carrera de Ingeniero en Administración en Recursos Humanos, que comenzó a los 60 años, sin contarle a nadie salvo a su marido, quien la apoyó en todo momento. Becada todos los años de estudio por Bienestar, gracias a sus buenas notas, aprobó el examen de grado con un flamante 6. “Cumplí mi sueño. No es fácil estudiar a los 60 pero se puede. Nunca es tarde”, comenta esta discreta y aplicada analista a quien ahora le brillan los ojitos: “Recuerdo el año 81 cuando llegue a trabajar al Hospital del Salvador como secretaria mi primer sueldo fue de $3.700 pesos. Tras 40 años de servicio, 20 de los cuales fue en Remuneraciones y otro tanto en Recursos Humanos DSSMO, gracias a la asignación profesional que le otorgan sus estudios superiores hoy tiene un mejor sueldo y mejores condiciones de jubilación. “La diferencia no es menor”, dice, feliz con su decisión y los mejores horizontes económicos que le ofrece.
Rosita Antezana y su nieta Elunay,
el regalo del cielo
Elunay, que significa Regalo del Cielo en mapudungún, es el tercer nieto de Rosita Antezana y nació el 23 de noviembre pasado. Otra guagua en la casa después de 12 años desde que nació su último nieto ha sido una felicidad para todos. “Estamos todos unidos en torno a Elunay. Ella es el centro de atención y nos tiene a todos revolucionados”, cuenta Rosita, quien comenta que en los primeros días Elunay y Karla, su madre, estuvieron con ella en su casa en Santiago a pesar de que viven en Hijuelas, cerca de La Calera. Ello, debido a una preeclampsia que obligó a madre e hija a controles médicos regulares tras el alumbramiento. A pesar del embarazo de alto riesgo, todo ha andado bien hasta ahora y ambas evolucionan de modo satisfactorio.
Rosita además nos cuenta que se tituló en diciembre de 2020 como Ingeniero en Administración en Recursos Humanos, lo cual le permitirá jubilar con mejores condiciones económicas, a la vez que le ayudó a darse cuenta de que era más que capaz de enfrentar un desafío como este. “Me gustaría agradecer a dos amigos que me apoyaron en este proceso tan importante en mi vida: Isabel Troncoso y Sebastián Sepúlveda. Desde el comienzo me ayudaron con sus conocimientos, consejos y sobre todo creyeron en mí, lo mismo que mi familia y mi hija Karla por su ayuda técnica y 100% comprometida”, concluye Rosa.